Campesino fue castrado por tiranía orteguista.

Impactante testimonio de la brutalidad de la tiranía Ortega-Murillo

Brayn Cruz Calderón, de 31 años de edad y originario de Jinotega es el ciudadano que fue castrado por las hordas criminales de la tiranía Ortega-Murillo en Wiwilí.  La hermana de la víctima Antonia Cruz, denunció públicamente ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos lo que ha sufrido y continúa sufriendo su hermano a manos de los criminales miembros de la guardia orteguista fiel a Daniel Ortega.

Según relata Anastasia, su hermano fue acusado de dirigir tranques en Jinotega y fue capturado el 30 de agosto cuando se encontraba en su casa en compañía de sus hijos. Durante la captura le dispararon en una pierna, lo patearon, le propinaron varios culatazos y golpes y lo arrastraron hasta la patrulla para luego llevarlo a un lugar conocido como la Cascada de San Enrique, donde lo siguieron golpeando.

Cruz añadió que la tercera parada de tortura fue la estación de la Guardia orteguista de Pueblo Nuevo donde lo interrogaron y al no decir lo que los verdugos querían escuchar para involucrarlo en las protestas contra la tiranía empezaron a torturarlo salvajemente y posteriormente dejarlo desangrándose por varias horas.

“Fue cuando lo agarraron entre varios y mientras unos le agarraban las manos y las piernas, otro policía con un cuchillo comenzó a picarle los testículos hasta que se los cortaron y también se lo metieron en el ano”, denunció la consternada hermana.

Las torturas se prolongaron toda la noche e incluyeron cuchilladas en la herida de bala que tenía en la pierna y en sus partes íntimas. Posteriormente le realizaron varias cortadas, una de ellas en el estómago, que le dejó expuestos los intestinos.

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